jueves, 6 de agosto de 2009

Los enfermeros reparten culpas por el error que mató al bebé Ryan

La enfermera se equivocó, pero el hospital incumple la ley, su gerente "falta a la verdad" y las instalaciones de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de neonatología carecen de medidas de seguridad para evitar errores como el que costó la vida al bebé Ryan, al confundir la enfermera la sonda de la alimentación. Éstas son las conclusiones de casi dos semanas de investigación de los expertos del Consejo General de Enfermería (CGE) sobre este suceso, ocurrido el pasado 13 de julio en el hospital Gregorio Marañón de Madrid.
"Ni las enfermeras que atienden neonatología en ese centro tienen la cualificación necesaria ni reciben la preparación que marcan las leyes, autonómicas o estatales", aseguró ayer con rotundidad el presidente del CGE, Máximo González, quien resumió así el error letal cometido con el bebé: "La enfermera no debió ofrecerse voluntaria para alimentarle, pero un hospital correctamente gestionado jamás se lo habría permitido".

El informe es muy crítico con el funcionamiento del Gregorio Marañón, especialmente con su gerente, a quien acusa de faltar a la verdad, y con el sistema de enfermería. En opinión de estos expertos, los errores comenzaron con la falta de experiencia de las personas que cuidaban a Ryan.
Personal inexperto

La responsable del bebé llevaba en esa unidad 11 días; la auxiliar, cinco meses; la autora del error, recién destinada para una suplencia de 24 días. Ninguna de ellas, insistieron, con la formación que marca la ley. En las mejores condiciones, esta formación dura dos años. En ocasiones -citaron el hospital Carlos III-, al menos tres meses intensivos. En el Gregorio Marañón, se reduce a "un cursillo de cinco días que no es obligatorio".

Las conexiones de la nutrición nasogástrica y venosa -cuya confusión originó el accidente- "son compatibles entre sí", según la Consejería de Sanidad y la directora de enfermería ha admitido que las bolsas "no se rotulan" con la sustancia que contienen.

También destacó el presidente del CGE que labores de nutrición que corresponden exclusivamente a las enfermeras "las desarrollan habitualmente" en el Gregorio Marañón las auxiliares, y recordó una queja presentada en 2008 por el personal de este departamento que alertaba ya de los riesgos derivados de la "caótica" asignación del trabajo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario